Desde la Coordinadora Estatalde Comercio Justo condenamos y lamentamos el terrible asesinato que el pasado 15 de marzo acabó con la vida de Romeo Robles, director de la cooperativa Panay Fair Trade Center, que produce azúcar Mascobado y bananas de Comercio Justo. Horas después el molino Kamada, en el que se procesa el azúcar, fue incendiado. Anteriormente tanto él como otras personas de la cooperativa habían sido objeto de amenazas y persecución judicial.
Romeo Robles es la víctima número 180 de una serie de asesinatos que desde 2010 se vienen produciendo en Filipinas dirigidos contra personas de la sociedad civil y líderes defensores de los Derechos Humanos. La dificultad en la identificación de los responsables de estas acciones está relacionada con la situación de un país con una democracia inestable.
Firme defensor de la justicia social, durante toda su vida R. Robles trabajó con la finalidad de reducir la pobreza en la isla de Panay, un territorio rico en productos agrícolas, pero con una fuerte desigualdad social.
La CECJ y todo el movimiento del Comercio Justo nos sentimos consternados por esta trágica noticia. Desde aquí queremos expresar nuestro afecto y cariño hacia los familiares y amigos cercanos de Romeo Robles, y mostrar nuestro apoyo y ánimo a los y las miembros de la cooperativa PFTC que con su trabajo día a día luchan por conseguir una vida digna y una mayor justicia social.
Más información:
http://www.alternativa3.com/es/noticias/2014/asesinato-productor-filipinas.html
http://www.altromercato.it/giustizia-per-PFTC (en italiano)