Bibiane Tuina es miembro dela Juntay responsable del área socioeconómica de la organización Le Gafreh, de Burkina Faso. Se trata de una organización formada por mujeres que, entre otras actividades, elaboran artículos de artesanía (monederos, bolsos, llaveros, etc.) a partir del procesado de bolsas de plástico que previamente recogen.
La iniciativa está obteniendo impactos positivos en muchos aspectos (social, económico, medioambiental, género…).
Recientemente B. Tuina ha visitado España, invitada por la organización SETEM.
¿Dónde está la sede de la organización Le Gafreh?
Está en Mogodilaso que es la segunda ciudad de Burkina Faso. Está al Oeste, cerca de Costa de Marfil. Es la zona húmeda del país. La mayoría de la gente vive de los cultivos, pero dado que esta agricultura genera mucha rotación también se dedican al comercio. La ciudad actúa como capital económica del país. El índice de analfabetismo llega al 70%.
¿En qué aspectos concretos ha beneficiado la actividad de la organización Le Gafreh a la gente que vive en la región?
A nivel sanitario, el trabajo implica una recogida de bolsas de plástico lo que conlleva un nivel de limpieza que no se está cubriendo, y por tanto las condiciones sanitarias mejoran.
En el plano medioambiental, esta tarea evita la muerte de animales que constituyen el sustento y fuente de ingresos de muchas personas. Las estadísticas oficiales calculan que la ingesta de bolsas está detrás del 30% de las muertes de animales del país.
¿En qué medida los plásticos constituyen un problema? ¿Hay alguna alternativa a este material?
Es un problema fundamental. Además de la mortalidad de los animales, las bolsas de plástico generan atascos en cañerías o riachuelos y por tanto se producen inundaciones y también enfermedades derivadas de agua estancada. Es un problema muy ligado a la falta de formación de la gente, ya que muchas personas se ponen enfermas pero no lo relacionan con la contaminación derivada de los plásticos. En el país hay una gran cantidad de residuos de este tipo ya que la mayoría de los envases son de este material. Además se ha generado una potente industria local de producción de plástico. Otros envases como el vidrio solo son accesibles para las personas más ricas. Ha habido algunas iniciativas de incorporar bolsas ecológicas pero dado que los ciudadanos no tienen interiorizado el problema muchas personas no las reutilizan.
Sería necesario que las bolsas de plástico desaparecieran, pero ahora mismo no hay una alternativa realista.
¿Cómo beneficia la asociación a las mujeres?
El apoyo consiste en ofrecer un trabajo a aquellas mujeres que están en una situación desfavorecida y generar fuentes de ingresos que de otra manera no tendrían. Su salario depende del número de artículos elaborados. En un momento de producción alto puede llegar a generar 120.000 CFA al mes, lo que equivale a 150 euros. Del precio de venta de cada producto ellas reciben el 50%. El resto va para la asociación, para pagar los gastos (local, agua, electricidad, etc.). Reciben su salario cada semana.
¿Cuántas mujeres trabajan en Le Gafreh?
La asociación engloba a 117 asociaciones que hacen diversas actividades. En total hay unas 5000 mujeres. En concreto, el reciclaje de bolsas de plástico y artesanía solo emplea a 85 de esas 5000 mujeres, pero esta iniciativa ha supuesto un gran reconocimiento mundial y un efecto “arrastre” que ha conseguido ingresos y ha permitido lanzar otras iniciativas que generan trabajo para el resto de mujeres.
¿Cómo es un día cotidiano de trabajo en Le Gafreh?
Aquellas mujeres que se dedican a recoger bolsas de plástico lo hacen por la mañana en el centro de la ciudad. Recogen sacos de unos 5 kilos. Quienes se dedican a otras tareas como limpiar las bolsas, coser, etc. trabajan en el local de la asociación. Por la noche se realiza la distribución de los productos a las tiendas. Las mujeres trabajan en grupos, en cada uno de ellos hay una responsable que es quien contabiliza las piezas y centraliza el pago.
¿Como perciben los hombres, los maridos de las trabajadoras esta iniciativa?
Al principio fue difícil porque ellos pensaban que las mujeres participaban con la única finalidad de tener mas libertad y estar lejos de los hombres pero a medida que ellas han ido ganado un sueldo y llevan ingresos a casa, la percepción del hombre ha cambiado.
Por tanto ¿está contribuyendo a evitar la exclusión social de la mujer?
Si, la vida de las mujeres ha mejorado.
Ellas sienten que pueden hacer frente a sus gastos y los de su casa y eso hace que se sientan útiles y que sean más valoradas.
Pero el reto es afianzar este impacto positivo ya que ahora mismo depende de las ventas de los artículos, de manera que si estos ingresos caen todos estos logros se pueden desmoronar.
¿Cuál es el papel de la mujer en Burkina Faso? ¿Cómo se vive su proceso de desarrollo?
El papel de la mujer es fundamental, constituye el sustento económico de la familia y el hogar. Creo que en los últimos años ha mejorado, sobre todo, porque desde las administraciones publicas y el gobierno se han tomado medidas en ese sentido, como por ejemplo una línea de microcréditos para financiar actividades de las mujeres, o una campaña para favorecer la escolarización de las niñas que está teniendo un gran impacto ya que disminuye el analfabetismo que actualmente es el freno principal para el desarrollo del país.
¿Cuáles son los objetivos de Le Gafreh a corto plazo?
Me gustaría que aumentara el número de mujeres que trabajan en la asociación pero para ello necesitamos más medios para ampliar el centro, contratar a una modista que propusiera nuevos modelos más acordes con las demandas del publico, y disponer de más máquinas ya que con las que tenemos no podemos procesar todas las bolsas de plástico que recogemos.
Con todo ello, nuestra finalidad última es aumentar el bienestar y la felicidad de las mujeres.
¿Cómo surgió la iniciativa del reciclaje?
La directora de la asociación tenía esta idea desde hace tiempo. Además varios organismos internacionales estaban tratando de dar soluciones a la cantidad de residuos que se generaban en países como el nuestro y la necesidad de fomentar el reciclado. En 2003 hubo un concurso de ideas promovido por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo y otros organismos. Presentamos nuestra idea y ganamos un premio que nos permitió poner en marcha la iniciativa. Desde entonces hemos ganado otros premios similares, lo que nos permite obtener ingresos y mejorar nuestro proyecto.
¿Cómo comenzaste a trabajar en la asociación y desarrollar esta tarea?
Comencé en2002. Miadhesión a Le Gafré fue particular. Yo he trabajado como funcionaria del estado, aunque ahora mismo estoy jubilada. Además desde siempre me he dedicado al tinte de ropa. Conocí a la vicepresidenta de la asociación, que es de mi misma etnia, a ella le gustó mucho la ropa que yo hacía, Fue ella quien me propuso entrar. Yo ya formaba parte de otra asociación de mujeres, así que integré esta asociación en Le Gafré. Me he ido implicando cada vez más, hasta ahora que formo parte de la junta directiva.
¿Qué opinión tiene sobre las multinacionales instaladas en su país?
Creo que son un cuchillo de doble filo. Por un lado, en el país no hay industria local suficiente como para producir todo lo que hace falta por tanto es necesario que haya empresas extranjeras que lo hagan y que además generen empleo. En ese sentido son positivas, pero por otro lado, su actividad tiene efectos negativos sobre el medio ambiente (producción descontrolada) y a menudo generan otros problemas como por ejemplo el de la droga-Además son sectores efímeros: llegan, consiguen generar empleo y aumentar los ingresos pero de repente se van y se desmorona todo lo que han montado.
¿Cómo podemos colaborar con su labor?
Después de haber trabajado como funcionaria del medio rural puedo decir que no me gusta la ayuda como tal, debido a las dinámicas que genera. Creo que la mejor ayuda para las mujeres es pagar su trabajo dignamente y ayudar a vender sus artículos.
También creo que la principal ayuda tendría que venir de nuestro propio gobierno ya que nosotras, además de la artesanía, estamos haciendo un trabajo necesario, de recogida y reciclaje, y entendemos que es una función importante, que debería ser subvencionada. Esto nos permitiría bajar el precio y poder vender el producto en nuestro país en más establecimientos.