Desde una perspectiva comunicativa, el consumo es un complejo espacio donde agentes muy distintos concurren y se expresan. Pero no todo en la comunicación es información. La publicidad, uno de sus ingredientes, es un tipo de comunicación que solemos identificar con la persuasión, así que a la hora de buscar información de un producto es probable que acudamos al propio establecimiento de venta o a otras fuentes, como las recomendaciones de alguna persona conocida o, incluso, Internet.
Ya en la tienda, el etiquetado del producto puede ofrecernos algo más de información aunque entonces entramos en otro orden de limitaciones. (…)
Pero además, en las decisiones de compra influyen otros muchos factores, desde los estímulos comerciales dentro del propio espacio de venta, hasta el valor intangible que le otorgamos a la marca de un producto. (…)
En un mercado abundante y lleno de estímulos, elegir un producto supone recurrir a numerosos atajos mentales nada racionales
El artículo «La ilusión en la libertad de elección», escrito por Isidro Jiménez Gómez, de ConsumeHastaMorir, forma parte del informe “El Comercio Justo en España 2013. Diagnósticos y alternativas en clave europea”, publicado por la Coordinadora Estatal de Comercio Justo con financiación de la AECID.