Estamos en la época más consumista del año. Un periodo que, en los últimos años, se ha adelantado y ampliado con la generalización del llamado Black Friday. Ante el aluvión de mensajes que nos incita a comprar, a crearnos nuevas necesidades y a entrar en la cultura de “usar y tirar”, las organizaciones de Comercio Justo queremos llamar la atención sobre los impactos que tiene este modelo de consumo.
Por un lado, los impactos ambientales: recuerda que en nuestra Tierra, los recursos son limitados (¡y solo tenemos una!). El modelo de producción y comercio convencional contribuye a acelerar el cambio climático (como denuncia Oxfam en su informe Comercio y justicia climática).
Por otro lado, los impactos sociales: la demanda excesiva de artículos de consumo y la necesidad de satisfacer esas demandas de manera rápida, favorece la explotación de trabajadoras y trabajadores (tanto de nuestro país como del Sur global), la precarización de sus condiciones laborales y el poner en peligro su seguridad y salud.
Por ello, ante la época más consumista del año, os ofrecemos cinco recomendaciones que favorecerán el cuidado de nuestro planeta y de las personas:
1- Piensa antes de comprar: ¿necesito este producto?
Consumir responsablemente implica consumir aquello que se necesita, pese a que el mercado incita a hacerlo de manera compulsiva. Reutilizar productos, arreglarlos en lugar de comprar uno nuevo o la compra de segunda mano son opciones interesantes a tener en cuenta para disminuir el impacto medioambiental o la producción a un ritmo y un volumen vertiginosos.
2- Recuerda que, a menudo, “lo barato sale caro”
La mayoría de los artículos tienen a sus espaldas una larga cadena de producción, por lo que un precio demasiado barato es muy posible que esconda explotación laboral, explotación infantil o condiciones de trabajo inhumanas.
3- Infórmate
Antes de comprar pregunta cómo, dónde y en qué condiciones ha sido producido un determinado artículo. Si el etiquetado no ofrece esta información o dónde encontrarla, lo adecuado es consultarlo en los propios establecimientos. Cada vez más, las empresas y marcas son sensibles a las opiniones y percepciones de los consumidores.
4 – Elige productos justos, sostenibles y respetuosos
Opta por productos de Comercio Justo, de economía solidaria, o aquellos en los que puedas garantizar que se han respetado los derechos básicos de los trabajadores y trabajadoras, y que su proceso de producción ha tenido el menor impacto ambiental.
5- No te vayas lejos
Compra en el pequeño comercio, en las tiendas cercanas. Evitarás desplazamientos en coche, favorecerás la vida en tu barrio y harás una compra más cuidada y humana.
Y, por último, si has seguido estos cinco consejos y quieres hacer algo más:
Puedes unir tu firma para pedir una legislación europea que que garantice los salarios dignos en el sector textil. Necesitamos 1 millón de firmas para que la Iniciativa Ciudadana Europea salga adelante. Apoya aquí la campaña Good Clothes, Fair Pay.