La capital cuenta con 269 comercios y 118 establecimientos hosteleros que venden productos de Comercio Justo mientras que el Ayuntamiento ha considerado criterios éticos y de Comercio Justo en 16 contratos y licitaciones en 2011 y 22, en 2012.
El delegado de Seguridad y Emergencias, Enrique Núñez, ha presidido este viernes la segunda sesión del Foro Municipal de Comercio Justo, en la sede del Ayuntamiento, cuyos objetivos son el seguimiento, asesoramiento y coordinación de políticas sectoriales y actividades para fomentar el consumo responsable, ético y sostenible.
En la sesión se han presentado dos documentos importantes. Por un lado se ha aprobado el programa de trabajo para este año 2013 cuyos objetivos se centran en informar a la ciudadanía madrileña, empresas y organizaciones sociales sobre el Comercio Justo, según explica el Consistorio. La idea es facilitar el acceso e incrementar la oferta de productos en comercios, establecimientos de hostelería y empresas de Madrid, así como en centros educativos y otros equipamientos culturales, tanto públicos como privados; y, por último, incorporar de forma efectiva el Comercio Justo en la administración municipal, en el marco de la normativa sobre contratación pública y patrimonio.
Por otro lado, también se ha abordado el informe sobre el cumplimiento del programa ‘Ciudad por el Comercio Justo‘, en el que se exponen los criterios por los que Madrid mantiene su acreditación en esta materia. «Hay un compromiso unánime de todos los agentes implicados, como son las instituciones, ONG, asociaciones, empresas y ciudadanos, de remar en la misma dirección por hacer de Madrid una ciudad solidaria y sensibilizada por el comercio justo», ha manifestado Núñez.
El Foro Municipal de Comercio Justo es el órgano colegiado encargado de mantener y promover este concepto en la Ciudad de Madrid. Está integrado por representantes de las áreas de Gobierno municipales, asociaciones de consumidores, la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid, organizaciones empresariales y representantes de las organizaciones de comercio justo.
Para recibir el título de Ciudad por el Comercio Justo se deben cumplir y mantener cinco criterios, como es el aprobar una resolución favorable al Comercio Justo y al consumo de este tipo de productos; ofrecer productos de Comercio Justo en cafés, restaurantes y tiendas de la ciudad; el compromiso del sector privado y organizaciones introduciendo este tipo de productos en su consumo interno; la comunicación y sensibilización a la ciudadanía y creación de un grupo de trabajo local que coordine el programa.
La Ciudad de Madrid cumple con estos criterios como lo demuestran los datos que se han presentado esta mañana que abarcan el período desde octubre de 2011 a octubre de 2012. Los madrileños pueden adquirir y consumir productos de comercio justo en 269 comercios y en 118 establecimientos hosteleros de la capital, superando los objetivos establecidos en la primera sesión que se cifraban en conseguir 163 y 108, respectivamente El Ayuntamiento se ha comprometido institucionalmente y con iniciativas de compra pública ética, con 16 contratos o concesiones de licitación en 2011 y 22 en 2012, y en referencia a las compras o contratos directos se cifran en 40 en 2011 y 97 en 2012, superando el compromiso de alcanzar una cifra de 16 en ambos supuestos. Además, 208 y 172 empresas, en 2011 y en 2012, respectivamente, se han adherido a este programa a través del consumo o de la sensibilización. Las organizaciones y comunidades educativas que se han añadido (27 en 2011 y 49 en 2012) consumen anualmente productos de Comercio Justo.
También se han superado las acciones de comunicación y sensibilización dirigidas a la población, cuantificadas en 123 en 2011 y 207 en 2012. En cuanto a información, se van a promover actuaciones de concienciación ciudadana para fomentar el cambio de actitudes y compromisos, tanto individuales como colectivos, a favor de una sociedad más justa y equitativa, donde los derechos de las poblaciones más desfavorecidas y la lucha contra la pobreza se conviertan en una de las prioridades para lograr un desarrollo sostenible.