Hoy jueves 8 de marzo del 2012, será una vez más, un día importante para la lucha feminista. Como cada mes de marzo desde principios del siglo XX, plazas y calles se llenarán de reivindicaciones con motivo del Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Las denuncias y exigencias han ido cambiado a lo largo del tiempo, pero el motivo de estas continúa estando presente en todo el mundo: el patriarcado.

Desde la Xarxa d’Escoles pel Comerç Just, y fijándonos en el informe  «Fabricado por mujeres. Género, la industria de la confección global y el movimiento por los derechos de las trabajadoras», publicado por la Campanya Roba Neta, queremos destacar la importancia de conocer la situación laboral en que se encuentran muchas mujeres de todo el mundo.

 Es a partir de la denuncia de estas situaciones, que podremos apoyar a todas las mujeres invisibilizadas, tanto como trabajadoras como agentes de cambio.

La realidad es que a nivel mundial, las que fabrican nuestra ropa en condiciones indignas, en su mayoría son mujeres. Son ellas las que forman el gran grueso de mano de obra explotada, a través de diferentes procesos de feminización del trabajo y de la pobreza. Este hecho repercute en su salud y en la de sus hijos o sus hijas.

 De la inseguridad laboral (en cualquier momento pueden ser despedidas) se deriva estrés, que se ve aumentado debido a las situaciones de acoso físico y verbal que sufren por parte de sus jefes.

 Además, las mujeres de la industria de la confección trabajan un gran número de horas, muchas en horario extra y obligatorio, a cambio de sueldos muy bajos, que desencadenan en problemas de nutrición y cansancio derivado. Las prácticas y los ambientes de trabajo son peligrosos para las mujeres que trabajan, puesto que no tienen en cuenta ni sus necesidades psíquicas ni físicas. A todos estos hechos hay que sumar que son las mujeres las que se encargan de las curas de sus familias, hogares e incluso comunidad.

 Por todos estos motivos, queremos denunciar esta situación y trabajar para erradicarla. Creemos que la denuncia es imprescindible y queremos que el máximo número de personas se unan. Es importante dar a conocer la situación de las mujeres explotadas por la industria textil y actuar en consecuencia como personas consumidoras críticas.

El Comercio Justo asegura la igualdad de género y la no explotación laboral. Por ello el consumo de estos productos se convierte en una actitud responsable y proactiva.

Para los centros educativos que quieran abordar estar problemática, desde la Red de Escuelas por el Comercio Justo, os proponemos hacerlo a través del cortometraje número 38 y de la unidad didáctica que encontraréis en nuestra web: Visionado del vídeo “38” de Setem Cataluña, dirigida al alumnado de educación primaria, ESO y superiores.

 Este proyecto recibe el apoyo de la Agencia Catalana de Cooperación al Desarrollo.

Más información: http://www.alternativa3.com/es/noticias/2012/mujeres-de-la-industria-de-la-confecci%C3%B3n.html

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